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Gracias por este 2022

Gracias por este 2022

A nuestros clientes:

Queremos agradecerles a cada uno de ustedes por su preferencia este 2022. Esperamos poder brindarles el mejor servicio, precios, asesoría y demás que podamos servirles para el próximo 2023. 

 

Cada año que comienza es un reto nuevo al cual uno como empresa se prepara. Hace planeaciones, presupuestos, campañas, pero al final las cosas salen como han de salir. Uno puede apegarse a estos planes, sin embargo ¿Quién pudo haber predicho la pandemia que vivimos hace unos años? ¿Quién pudiera haber vaticinado los impactos que tendría una guerra al otro lado del mundo sobre los precios del acero? Este tipo de interrogantes afectan directa y completamente la forma en la que hacemos negocios por lo tanto, podemos planear y planear pero al final, es limitado aquello sobre lo que tenemos control en realidad. 

 

Por tanto, aquello sobre lo que sí tenemos control, sobre de eso nos avocamos día con día: el servicio. Quizás uno haya podido visitar nuestra sucursales físicas con cotización en mano y buscar el mejor precio posible y tú como cliente estás en todo tu derecho. Sin embargo, dentro de nuestra política y filosofía lo afirmamos: brindar precios justos sobre los productos que comercializamos. Estos precios justos pagan a cada uno de nuestros colaboradores. Colaboradores que día con día, se levantan todos los días, sí, buscando las mejores condiciones con las cuales ofrecer nuestros productos, pero que antes que todo ofrecen el mejor servicio y apoyo posible a cada uno de ustedes.

 

Quisiera que se reiterara que como negocio local, su preferencia ayuda a la económica más directa y en la cual convivimos. Por eso, nuestra gratitud perpetua este 2022 y esperamos de todo corazón, poder servirte con aún mejores condiciones, más variedad de productos pero sobre todo, con ese servicio y calidez que nos distingue.

 

A nuestros colaboradores y proveedores:

Estamos llegando al final del año y con esto, otro ciclo termina. Con el favor de Dios, nos mantenemos en comunión en este lugar de trabajo, nuestra segunda casa. Si reflexionamos un poco, quizás pasamos más tiempo conscientes, despiertos, en nuestro centro de trabajo o con nuestros compañeros que nuestra casa familiar. ¡Qué bueno sería si pudiéramos hacer un esfuerzo por integrarnos en familia, respetando nuestras diferencias, de sexo, creencias, políticas, etc. y buscando trabajar por el bien común! Un bienestar común donde además de obtener el sustento económico, veamos por el bienestar de nuestros compañeros y sus familias. Que veamos por satisfacer las necesidades de nuestros clientes con amabilidad y calidez, haciéndonos dignos de su confianza. Esta confianza es un valor fundamental que requiere pasar por la responsabilidad, el compromiso, la puntualidad, la tolerancia en una palabra: amorPorque el amor no es un sentimiento, sino una actitud, una forma de vida en la que cada persona se compromete a vivir y darse a los demás. 

 

Lo anterior suena a utopía, a algo inalcanzable. Pero si nuestro fundado hubiera creído que es imposible, esta empresa jamás hubiera visto la luz, jamás hubiera existido... Ya que para una persona con educación hasta el 3er año de primaria, huérfano de padre, que tuvo que iniciar su vida laboral aun siendo niño, trabajando de joven como ayudante de varios oficios. Lo que la vida le proyectaba a nuestro fundador era un constante esforzarse físicamente para ganar el sustento diario. A esto, papá no lo vio como utopía sino como un reto que la vida le propuso, y se dio cuenta que tenía una dignidad demasiado alta, capacidades insospechadas que fue descubriendo al afrontar los retos de la vida. Este se volvió autodidacta y fue educándose sólo. Se ganó la confianza de mucha gente que lo encaminó en la vida profesional como empresario y se esforzó muchísimo para mantenerse siempre confiable. 

 

Estamos viviendo los últimos días del año civil, pero también estamos celebrando con alegría la Navidad. Debemos celebrar la Navidad con el corazón desbordante de gozo y esperanza, porque festejamos la venida de Dios al mundo; con el nacimiento del Niño Dios se inicia la plenitud de los tiempos. Dios viene a nosotros y se queda con nosotros hasta el final de los tiempos. En Él, Dios se nos revela y nos muestra su infinito amor por cada uno de nosotros, nos alcanza la dignidad de hijos de Dios, con toda la Gracia, Sabiduría, Fortaleza y todos Sus Dones, nos nuestra los alcances ilimitados que cada uno de nosotros tiene. 

 

Queridos colaboradores, pensemos un poco, pero con mucha seriedad en el Amor que imprimimos a nuestra actividad diaria, con nuestros familiares y amigos, en el intercambio con nuestros compañeros de trabajo, en la relación con nuestros clientes. Analicemos que tanto meditamos en la búsqueda del Bien Común y en las enseñanzas de Nuestro Señor Jesucristo en su paso por este mundo. Él nos dejó las bases de cómo vivir en el Amor, trabajando por el Bien Común y por La Paz.

 

La Familia Pérez Robles les deseamos que en esta Navidad celebremos con gran alegría y conciencia la llegada de Dios a nuestros corazones y que la llegada del Nuevo Año 2023 nos encuentre con una Fe Viva, una Esperanza Activa y un Ardiente Amor para afrontar y salir triunfantes en los retos que nos traerá, pero sobre todo que La Paz de Dios este con todos ustedes y sus familias.

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